A esta altura para aquellos que han pasado por acá al menos una vez, sabrán de mi amor por las marutakes y sobre todo por las “tacuaras”. Un bambú tan fácil de conseguir y que seguramente sirvió de iniciación en el mundo de la pesca con las clásicas “mojarreritas” que tantas alegrías nos dieron de chicos… Y porqué no de grande! Sigo amando “mojarrear”

Hoy con unos cuantos años más encima y enfocado netamente en la pesca con mosca (ya no practico otro tipo de pesca a excepción de mojarrear, como aclare en el párrafo anterior) mi pasión por el bambú es cada día mayor. Encuentro en ese material tan noble una conexión especial que se extiende mucho más allá de la pesca en si, prefiero y disfruto muchísimo más una buena presentación, que pinchar un pescado sin darme cuenta o colando agua. El poder ver que las horas de trabajo en mi taller dan como resultado una herramienta tan noble, me llena de alegría y satisfacción.

Marutake – tacuara

Generalmente aprovecho los inviernos patagónicos, para meterme de lleno en la fabricación de algunas cañas, buscando siempre algún nuevo desafío o idea. Supongo que todos los que estamos en este mundo, siempre buscamos fabricar la caña ideal, la cual quizás no exista y es ahí donde radica el principal incentivo. Este año y luego de haber regalado prácticamente todas las marutakes que tenia, me propuse volver a la fabricación de las mismas y en especial, utilizando tacuara o hotei. (Anibal me proveyó de una buena cantidad) Luego de pensarlo un poco, se me ocurrió la idea de fabricar dos marutakes, pero no dos marutakes cualquiera, sino dos que en su relativa similitud, permitieran intercambiar tramos, de manera tal de poder combinar ambos butts, con ambas punteras. De aquí surge el título de marutakes intercambiables. Con esta simple idea comencé a elegir el material, el cual considero el paso más importante y difícil, ya que de esto dependerá en gran medida el resultado final. Claramente contar con la mayor cantidad de bambú posible, va a jugar totalmente a favor, porque permitirá conjugar mejor la combinación de talones de pelea con punteras. En mi caso, contaba con la cantidad suficiente, así que luego de varias pruebas, elegí material como para contar con dos butts bien distintos. Uno bien potente y otro más flexible, pero ambos con el mismo peso y con un diámetro en su parte más fina, exactamente iguales. Hice los propio con las dos punteras, obteniendo así la posibilidad de contar con cuatro combinaciones muy diferentes, las cuales las convierten en una muy buena opción para combinarlas según lo requiera la situación de pesca y de esa manera tener un equipo más acorde al contexto en el que nos encontremos pescando.

Detalles

Una vez seleccionado el bambú, simplemente procedi a comenzar con las largas horas que lleva todo el proceso, desde el cortado, enderezado, templado, etc. etc. Utilice madera para las empuñaduras y asientos de reel, combinados con anillas impresas en 3D con diseños propios. Resultaron dos lindas cañas de 7′ para líneas #1, #2 y #3. Por supuesto con acciones e improntas bien distintas, según se combinen. A días de que comience la temporada de pesca en Patagonia, estan listas para cuando baje un poco el agua y se comiencen a ver eclosiones de insectos!

Les dejo una serie de videos donde se pueden ver en detalle las cañas y cómo se comportan volando líneas. Les deseo una muy buena temporada para todos y recuerden siempre que lo más importante es el medio ambiente y los peces a los que tanto molestamos. Seamos concientes de esto cuidando los lugares por donde nos movemos, llevándonos la basura y devolviendo los pescados de la mejor manera posible.


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